abraso mi ultimo deseo para plantarlo en mis cimientos
una de las cuantas raíces que mantienen mi edificio
sin derrumbarse al acantilado.
Hoy un pájaro me pregunta que ha pasado y ni siquiera nuestras acciones pueden responder
es que tu no entiendes, yo no sedo, y ninguno empuja
sin embargo el espiral debe continuar, mas allá
hasta que mi imaginación no pueda ilustrar más
hasta que el universo tenga fronteras
aquellas que prometí nunca encontrar.
Cuestiono cada pluma de mi fénix, que mira a otros ojos
pero siempre hay algo en el fondo de sus canales
La euforia no se consume
porque aún la tristeza es densa
y es dulce, como el agua del océano
el mínimo impulso desbordará mis canales
Extraña energía, llega y difumina
cada cicatriz
entonces que más esperamos para impulsar las alas de la vida
y desarrollar la sabiduría que se nos ha concebido?
como hijos del sol
pertenecemos a su manto dorado
con las emociones en el estomago
recibimos aprendizaje
el perfil de la vida, se sujeta a un espiral.
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